Así, la luna me acompañó en una noche fría, llena de palabras y melodías.
Mi alma, a kilómetros de mí, tiene la incertidumbre de saber si está aquí o allá, en el infierno o junto a ti.
¿Cómo llega la luz de una palabra a mi corazón? ¿Mediante sueños y risas entrecortadas?
Un suspiro a media noche me dijo que mi alma llena todo mi alrededor, que una canción vive en mí.
Ese suspiro me hizo sentir mil cosas, me recordó todo lo que siento por ti. Amé ese suspiro.
Espero que se vuelva a repetir bajo esa hermosa y siniestra luna que se posa ante mis ojos y ante los ojos de alguien más.