Completamente devorado por tu mirada, idiotizado por tus labios, en deuda con los dioses.
Soy lo que soy por mis errores, soy un loco onírico que te desea con lo más íntimo de su ser.
Caigo en picada cuando nuestro universo tambalea, me aterra la idea de no tenerte.
Aferrado a tus manos salto a una aventura definitiva: Entrelazar mi alma con la tuya.
Un ramo de margaritas para tu alma.